La filosofía hermética

Los labios de la sabiduría están cerrados, excepto para los oídos del entendimiento.

Entre estos grandes maestros del antiguo Egipto moró una vez uno a quien los maestros aclamaban como  el maestro de maestros. Este hombre, si es que en verdad era hombre, moró en Egipto en los primerísimos días. Era conocido como Hermes Trismegistus.  Él fue el padre de la sabiduría oculta; el fundador de la astrología; el descubridor de la alquimia

La fecha de su residencia en Egipto, en esa su última encarnación sobre este planeta, no es conocida ahora, pero ha sido fijada en los primeros días de las más viejas dinastías de Egipto -mucho antes de los tiempos de Moisés-. Las mejores autoridades le consideran como un contemporáneo de Abraham, y algunas de las tradiciones judías llegan a afirmar que Abraham adquirió una porción de su conocimiento místico a través de Hermes mismo.

De la misma manera, no se sabe exactamente hace cuanto tiempo  Hermes  apareció en el valle del Nilo, iniciando lo que posteriormente sería la gloriosa civilización egipcia. El tiempo varía según muchos estudiosos entre 10.000 a 5.000 años a. de C.

Conforme los años, los egipcios deificaron a Hermes, y le hicieron uno de sus dioses, bajo el nombre de Thoth.

Años después, la gente de la Grecia antigua también le hizo uno de sus muchos dioses -llamándole Hermes, el dios de la Sabiduría-.

Los egipcios reverenciaron su memoria por muchos siglos -sí, decenas de siglos- llamándole el escriba de los dioses y confiriéndole, honoríficamente, su antiguo título, «Trismegistus», que significa «el tres veces grande.

 En todos los países antiguos el nombre de Hermes Trismegistus fue reverenciado, siendo sinónimo el nombre con fuente de la sabiduría.

Incluso en estos días, usamos el término hermético en el sentido de secreto,  y esto fue la causa de  que los seguidores de Hermes siempre observaron el principio del secreto en sus enseñanzas.

EL KYBALION

Los siete principios sobre los que se basa toda la Filosofía Hermética son los siguientes:

1. – El principio del Mentalismo
«El TODO es Mente; el universo es mental» «Todo lo que ocurre siempre está reflejando alguna pauta de Pensamiento que llevamos dentro»

2. El principio de Correspondencia
«Como arriba es abajo, como abajo es arriba». El orden en lo exterior te ayudará a encontrar el orden en lo interno.

3. El Principio de Vibración
«Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra».

4. El Principio de Polaridad
«Todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son semi verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse». Dónde cesa la oscuridad y comienza la luz? ¿Cuál es la diferencia entre grande y pequeño? El principio de polaridad explica estas paradojas.

5. El Principio del Ritmo                                                                                                                    «Todo fluye y refluye; todo tiene sus períodos de avance y retroceso, todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento hacia la derecha, es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda; el ritmo es la compensación».

6. El Principio de Causa y Efecto
«Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de acuerdo a la ley; la suerte no es más que el nombre que se le da a una ley no conocida; hay muchos planos de casualidad, pero nada escapa a la Ley».

7. El Principio de Generación.                                                                                                        «Todo tiene su principio masculino y femenino». El ánima (aspecto femenino presente en el inconsciente colectivo de los hombres) y animus (aspecto  masculino presente en el inconsciente colectivo de la mujer) de Jung.

 

Publicado por losnumerosylavida

Los Números y la Vida es una escuela de numerología karmica dirigida por Teresa Gómez, licenciada en bioquímica, astrología, tarot y numerología karmica.

Deja un comentario