Arcanos son aspectos profundos de nuestro espíritu. Siendo manifestaciones que surgen del inconsciente rechazan los limites del pensamiento racional, negándose a manifestar sus secretos de otra manera que no sea poética, pero no desde el ego, requiere que nos olvidemos de nosotros mismos.
Cuando los Arcanos del Tarot se memorizan, linea a linea, color a color, se inscriben como un tatuaje en el inconsciente y pasan a formar parte de esas imágenes cargadas de incontables sentidos que Jung denominó Arquetipos, representando todas las facetas de nuestra misteriosa intimidad.
El Tarot es un canto a la complementariedad de los opuestos: materialización del espíritu y la espiritualización de la materia.
«El Mago, en tu saco fecundo mora la unidad que sin cesar nos multiplica»
» La Sacerdotisa o Papisa, vientre sin fin donde surgen los abecedarios, son la pura sustancia de todo lo que existe».
Alejandro Jodorowsky